En días como hoy no puedo ser optimista: filas eternas, un calor carroñero, tos de perro panteonero...
Si, ya se que hay personas que viven peor que yo, que sufren más, que no tienen que comer, que darían lo que fuera por tener lo que yo tengo... sí, también sé que el pasto del vecino siempre crece más verde...
Y tampoco soy una ingrata. He caminado mucho y me encuentro en un buen lugar. Es solo que no sé, el malestar físico siempre hace sombrío cualquier panorama.
Pero no es sólo la gripa, la verdad es que en mi interior se están moviendo tantas cosas... y es bueno, lo sé. El problema es esperar a que lo nuevo germine.
Drama, drama... quien sabe. Probablemente exagero. Probablemente me pasará como tantas veces, que al volver la vista atrás las cosas no eran tan malas como se sentían en el momento. Mientras tanto, compraré una dotación más grande de kleenex...
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Porque lo que se habla no se actúa: