el que busca encuentra

viernes, 30 de noviembre de 2012

Casi dos meses sin actualizar. Y no, no es que se me hayan acabado las palabras o que no tenga nada que decir. Quizá es que voy a vaciarlo al twitter, en corto, como una catarsis inmediata en menos de 140 caracteres.

Pero a veces eso no es suficiente. A veces es necesario reunir las ideas, digerirlas, plasmarlas y verlas todas juntas. Cuando decidí abrir el blog fue porque necesitaba un espacio donde acomodar lo que no se puede tener adentro, pero que tampoco tiene sentido que esté afuera. El blog es una especie de limbo.

Y ya se acaba otro año. Y esta vida es tan distinta a la que fue el año pasado. Y el pasado. Y el anterior a ese. Y no se si eso es malo o bueno. Sigo siendo yo, aunque soy distinta. Sería raro si no lo fuera después de todas estas vivencias. Se que en ocasiones sueno como anciana, pero es verdad que a veces siento que he vivido demasiadas cosas para tan poco tiempo.

Y si se fijan bien, digo "he vivido" y no "me han pasado". Ya estoy dejando esa maldita costumbre de sentir que todo me pasa, como si fuera una hoja en el viento. La vida no es así. Uno vive lo que elige vivir, por difícil que cueste creerlo, por difícil que cueste asumirlo. Estoy en eso.



viernes, 12 de octubre de 2012

Hoy mi madre no me quiso.
La he rondado horas enteras
pero nada, no me quiso
ni me ha pegado siquiera.
Salgo a morir al valdío
volteando todas las puertas.

Arde el sol en el silencio
amarillo de la siesta.

Ni gatos ni vigilantes
sólo la calle desierta .

¿Cómo me voy a morir

sin que mi madre me vea?


-"Primera soledad" de Armando T. Gómez

domingo, 9 de septiembre de 2012

I´m back.

Wow. Ahora sí he tardado mucho en actualizar este blog. Quizá me pase como a muchos otros, hay otros intereses, otras cosas que hacer... "ya no me representa"... 

Aunque este blog sigue representándome. Sigo siendo yo. Siempre. Y lo de hace años también. Eso sólo que la vida ahora me tiene muy ocupada. Después del año sabático que me tomé -que me tuve que tomar- vuelvo a la rutina de estar al mil en el trabajo. Y estoy feliz. Cansada pero feliz. Me siento feliz de darme cuenta que no he perdido nada de lo que me constituía. Tuve mucho miedo todo este tiempo. Miedo de que la pérdida hubiera sido tal que el vacío se hubiera quedado para siempre conmigo. Miedo que la tristeza hubiera arrasado con todo. 

En varios momentos me sentí así. Como si solamente hubiera quedado un cascarón de mi. A veces me encontraba personas o platicaba con gente que hacía mucho que no veía y al hablarles de mí, de lo que hacía de pronto me sentía como una impostora, como alguien que había sido pero ya no más. Y eso dolía. Mucho. 

Y ahora me doy cuenta que todo eso fue una fase, una etapa. Necesaria pero no eterna. Y me siento feliz de ser capaz de volver al ruedo. Saber que la fuerza de mi abuelo y de Rosa están dentro de mí, que su ejemplo me ha constituído, han influido en mí más de lo que yo pensaba y que gracias a ello estoy de vuelta. 

Vuelvo a sentirme útil, a sentir que lo que hago es valioso y que soy buena en lo que hago. Sí, es cansado levantarse a las 5 de la mañana todos los días, viajar, dejar solos a mis perros, pero es satisfactorio saber que no he perdido mi mojo. ¡¡¡I´m back baby, I´m back!!! 

miércoles, 18 de julio de 2012

Siguiendo el ejemplo del Fénix

Tengo un buen rato sin actualizar y me disculpo con ustedes, queridos lectores, por eso. No es que se me hayan agotado las ideas, es más, siento que tengo una maraña en la cabeza. Quizá ese sea el problema, que no se por donde empezar. Me estoy moviendo y eso cuesta trabajo.

Es difícil retomar el camino: el trabajo, las amistades, la vida social. No es fácil dejar de estar echa bolita en la cama escondida del mundo como si eso hiciera que la vida se detuviera. Ahora que salgo me doy cuenta de que no es así, que la vida siguió y que tengo que enfrentarme a ese hecho. Llenarme de valor y volver a hacerme un lugar allá afuera.

En momentos me enojo. No puedo creer que de nuevo esté pidiendo trabajo, como hace 9 años que egresé de la universidad. Se que no soy aquella de 21 años. Pero aún así, me confronta con mi narcisismo, con esa Marianita que se enfurece porque no le reconocen lo que sabe, lo que ha hecho.

Ni modo. He tenido otras crisis y he salido de ellas, con herramientas, aprendizajes. Cicatrices, sí, pero ninguna herida mortal, afortunadamente.

Aquí sigo.

viernes, 15 de junio de 2012

El cuerpo y su lenguaje. El lenguaje en el cuerpo

Pues bien, lo hice. De adolescente siempre está la curiosidad de ¿qué se sentirá tener un tatuaje? y si lo tuviera ¿dónde lo tendría? pero bueno, son de esas cosas que se quedan entre los escombros de la construcción de la vida adulta.

Sin embargo -y lo saben quienes han leído este blog- el año pasado llegó a mi vida un terremoto que arrasó con todo. Murió mi tía Rosa y mi abuelo Mariano. Se fueron con 2 meses de distancia, ella en abril, él en junio. Y fue el año más difícil de toda mi existencia. Poco a poco he ido saliendo del hoyo depresivo tan profundo en el que me sumí. Es por eso que necesitaba algo que simbolizara todo esto. Quizá hay más formas, pero yo sentí que ésta era la mía. Así que me armé de valor y hoy por fin, fui a tatuarme. Son unas alitas y en medio -en el cuerpo, por llamarlo de algún modo- las iniciales RM. Las suyas. Las mias. Porque yo llevo su nombre, yo me llamo así por ellos y gracias a ellos. Me las puse en la espalda.

¿Pero porqué un tatuaje? Necesitaba algo que me marcara. Yo no soy la misma desde que se fueron, no puedo ni quiero serlo. Tenía que hacer visible esa diferencia, ese cambio. Y sabía que tenía que ser así, llevarlos en la piel, con todo el dolor que conlleva. Dejarlos ir a cambio de que se queden para siempre conmigo. Que me cuiden las espaldas, pero más que ángeles guardianes, introyectarlos, hacerlos míos, guardar todo lo bueno que me dieron ya que gracias a eso no me desmoroné cuando murieron. En la espalda que tantas veces me rascó mi tía Rosa cada vez que me angustiaba, que no podía dormir, que necesitaba cariño, amor, desde bebé hasta hace tan poco. En la espalda que me recuerda a la espalda llena de lunares de mi abuelo, esa espalda que fue lo suficientemente fuerte para soportar tantas dificultades.

Con cada pinchazo lloraba a mares. No dolió tanto (no después de haber soportado depilación con cera en todo, todo el cuerpo). Era más bien un llanto catártico, esas últimas lágrimas de dolor por ellos. Porque para ellos van dedicadas. Porque les he llorado hasta vaciarme. Me siguen haciendo falta, siempre será así, pero la cicatriz ya está terminando de cerrar. Y se convertirá en eso, en una marca.

No creo que me haga otro. Hasta ahorita siento que por muchas dificultades -o por muchas alegrías- nada va a ser tan significativo como la muerte de Rosa y Mariano. Y Rosa Mariana -o sea yo- seguirá adelante.

lunes, 11 de junio de 2012

Mi dolor


Conozco perfectamente mi dolor:
viene conmigo disfrazado en la sangre
y se ha construido una risa especial
para que no pregunten por su sombra.
Mi dolor, ah, queridos,
mi dolor, ah, querida,
mi dolor, es capaz de inventaros un pájaro,
un cubo de madera
de esos donde los niños
le adivinan un alma musical al alfabeto,
un rincón entrañable
y tibio como la geografía del vino
o como la piel que me dejó las manos
sin pronunciar el himno de tu ancha desnudez de mar
Mi dolor tiene cara de rosa,
de primavera personal que ha venido cantando.
Tras ella esconde su violento cuchillo,
su desatado tigre que me rompió las venas desde antes de nacer
y que trazó los días
de lluvia y de ceniza que mantengo.
Amo profundamente mi dolor,
como a un hijo malo.

  Roque Dalton

jueves, 17 de mayo de 2012

Frases de Buñuel

- "Admiro al hombre que permanece fiel a su conciencia, cualquier cosa que ésta le inspire".
 
- "El misterio es el elemento clave en toda obra de arte". 

- "La ciencia no me interesa. Ignora el sueño, el azar, la risa, el sentimiento y la contradicción, cosas que me son preciosas".
 
- "Soy ateo gracias a Dios".
 
- "Un paranoico, como un poeta, nace, no se hace".
- "El erotismo va a la par con el sentimiento de pecado. Sin la religión, el erotismo es menos interesante."
 
- “Todo deseo tiene un objeto y éste es siempre oscuro. No hay deseos inocentes.”
- “Cuando contemplo una de mis viejas películas, sufro. Porque aquello que he podido hacer es muy inferior a aquello que yo hubiera querido hacer.”

jueves, 10 de mayo de 2012

De lo que viene siendo un aniversario que no lo es más

No lo es más. Desde hace 4 años ya no lo es. Y sin embargo sigue contando. De distinta manera, pero ahí sigue. ¿Cómo se le cuenta a lo que ya no se le puede contar? El 6 de mayo hubiera cumplido 6 años de casada. Mi vida sería muy distinta a lo que ahora es, quizá ya tendría hijos, quizá seguiría trabajando como loca corriendo tras un sueño que no era el mío, quizá no tendría estos dos hermosos perros que llegaron a mi.

El otro día leía un post y coincidí totalmente con lo que decía: mi generación, aquéllos que me invitaron a su boda, de los que fui madrina, ahora se están divorciando. Y no, no es maldición, simplemente la época en la que nos tocó vivir nos da más a elegir. Y se puede elegir sentirse bien. Y se puede elegir y decidir terminar una relación que no te hace feliz. 

Y ahí queda la marca, la cicatriz.Ya no duele, miro hacia atrás y me quedo satisfecha, con lo que hubo y con lo que fue. Es sólo que hay cierta... mmm... no se explicar la sensación.... no se si sea nostalgia, curiosidad... de lo que pudo haber sido, pero no se hasta que punto habría que retroceder para comenzar el mundo paralelo donde se cumpla el "y vivieron felices para siempre". 

Y, ahora que lo pienso, nunca celebré ningún aniversario. El primero -y el único que pude haber celebrado- me lastimé el pie y la pasé en el hospital esperando a que me sacaran una radiografía para ver si no estaba fracturado. Sin embargo, no teníamos nada planeado. Quizá desde ahí estaba claro que no había nada que celebrar. 

Puede que sea hora de festejar los años que llevo por mi cuenta, tropezando y aprendiendo, pero siempre avanzando. Eso también podría ser digno de un aniversario. 


 

viernes, 27 de abril de 2012

El puente del arcoiris

Hay un puente que queda entre el Paraíso y la Tierra, y se llama Puente del Arco Iris.
 
Cuando un animal que ha sido especialmente amado por alguien aquí en la Tierra muere, entonces va al Puente del Arco Iris. Allí hay valles y colinas para todos nuestros amigos especiales, para que ellos puedan correr y jugar juntos. Hay mucha comida, agua y sol, y nuestros amigos se encuentran cómodos y al abrigo. Todos los animales que han estado enfermos o que eran ancianos, recuperan su salud y vigor; aquellos que fueron heridos o mutilados recuperan lo perdido y son fuertes nuevamente, tal como los recordamos en nuestros sueños de días y tiempos pasados.
 
Los animales están felices y contentos, excepto por una pequeña cosa: cada uno de ellos extraña a alguien muy especial, alguien a quien tuvo que dejar atrás. Todos corren y juegan juntos, pero llega un día en que uno de ellos se detiene de repente y mira a la lejanía. Sus brillantes ojos se ponen atentos; su impaciente cuerpo se estremece y vibra. De repente se aleja corriendo del grupo, volando sobre la verde hierba, moviendo sus patas cada vez más y más rápido. Tú has sido avistado, y cuando tú y tu amigo especial finalmente se encuentran, los dos se abrazan en un maravilloso reencuentro, para nunca separarse de nuevo. Una lluvia de besos cae sobre tu rostro; tus manos acarician nuevamente la cabeza amada, y puedes mirar nuevamente a los confiados ojos de tu mascota, tanto tiempo apartada de tu vida, pero nunca ausente de tu corazón.
 
Entonces los dos cruzan el Puente del Arco Iris juntos...

Autor desconocido

Mi próxima vida (Por Woody Allen)


En mi próxima vida quiero empezar de atrás para adelante. Comienzas en la muerte y ahí empiezas el camino. Entonces despiertas en un asilo de ancianos y te vas sintiendo mejor cada día. Te expulsan de ahí por ser demasiado saludable y te vas a recoger tu pensión, entonces, cuando empiezas a trabajar, te dan un reloj de oro y te hacen una gran fiesta en tu primer día. Trabajas 40 años hasta que eres lo suficientemente joven para disfrutar tu retiro. Te emborrachas, te vas de fiesta y eres promiscuo hasta que estás listo para ir a la preparatoria. Después, cuando entras a la primaria, te vuelves un niño y juegas, no tienes responsabilidades y te conviertes en bebé hasta ser un recién nacido. Y luego, gastas tus últimos 9 meses flotando en un lujoso spa con condiciones especiales como aire acondicionado y servicio a la habitación, que va creciendo cada día hasta que ¡voila! Terminas en un orgasmo. No tengo más que decir.

martes, 24 de abril de 2012

Lo que estoy leyendo

... bandadas de palomas que hienden los cielos, mujeres que caminan con peroles de aluminio llenos de leche tibia de la cual se desprende un vapor grueso como nieve, viejas locomotoras d piel de carbón y fanales de luz polvorienta que navegan sobre las estelas luminosas que otras locomotoras ya muertas, ya coronadas con guirnaldas de gardenias, ya olvidadas, ya fundidas y refundidas en los viejos hornos y en las memorias herrumbrosas que trazaron hace tantos años como días tiene el invierno sobre los caminos de balastro de grava de río, grava traslúcida, grava húmeda: y con nuestra dos veces labios undosos, una vez lengua bofa y esponjosa, papilas umbrátiles y campanilla viscosa y ensalivada, y con nuestras mil veces cavernas espléndidas, mil veces venas transversadas y un millón de veces nervios lancinantes: con nuestra boca, con nuestra piel, sentirlas, gustarlas, tocarlas, saborearlas y contarlas; en copos nevados y amargos se desborda la espuma, y con nuestra boca, gustarla, gustar la misma boca que gustó José Trigo aquel día o tarde o noche en que llegó jadeante al furgón de la mujer, perseguido, acosado, pero no por primera vez en su vida, porque alguna vez, cuando muy niño, un hombre lo persiguió por los bosques y alguna otra vez, cuando muy hombre, otro lo perseguirá por los campamentos: el mismo que le azuzó a la muerte esa noche en que llegó al furgón de la mujer y la mujer lo esperaba, desnuda en la bañera de aluminio, con los ojos muy abiertos, y esa vez no mirando a ninguna parte y sí mirándolo a él, a él que miraba los trozos de espuma blanca escurrirse por los pechos, resbalar por la ondulada prominencia de su vientre y licuarse en la superficie oscura del agua, sí mirándolo mirándola, con nuestros dos veces iris constelados, mirándola y deseándola, con nuestras mil veces venas transversadas, deseándola y oyéndola, oyendo el murmullo tumultuoso de su aliento, murmullo no de frío, no de miedo, no de amor y sí simple y sencillamente de estar con él, de sentirlo a él, a un hombre a el hombre; con nuestras dos veces pabellones cóncavos retorcidos; el hombre que trepó al furgón, José Trigo, así lo vio una, una que se bañaba presintiendo, creyendo o queriendo creer que él, José Trigo, habría de llegar pronto y una habría de angustiarse...


José Trigo, de Fernando del Paso

sábado, 21 de abril de 2012

El efecto mariposa

Rescate de un pequeño ensayo que tuve que hacer en una clase de psicosomática: 



“Cuando el corazón no llora, lloran los órganos”´
Boris Cyrulnyk


Hasta el momento, esta es la tarea que más me ha costado trabajo realizar, durante el tiempo que llevo en la formación. Por más que lo he intentado, me siento frente a la computadora y no puedo empezar a escribir. Invento mil excusas: tengo algo que hacer que es más urgente, necesito revisar mi correo, voy a ver a Dr. House a ver si me inspiro… burdas justificaciones que ni a racionalizaciones llegan.

Luego pensé: ¿Y si hablo de mis múltiples padecimientos orgánicos?: De mi estreñimiento crónico, desde que tengo como 8 meses de edad, el cual se me quitaba cada fin de semana cuando mi mamá llegaba a Uruapan de Morelia;  de las gripas frecuentes a lo largo de la primaria –y de cómo mi abuela me ponía jitomates asados en las plantas de los pies, como remedio, aunque sigo sin entender muy bien la lógica de tal procedimiento-;  de la colitis nerviosa que padezco desde que entré a la universidad, la cual oscila entre mas-o-menos-bien e hijodesumesientodelach…; sin olvidar la taquicardia extraña que tuve en el último año de la facultad y que así como me la diagnosticaron, por casualidad, en un chequeo de rutina, así se me quitó. En el recuento debería estar también el periodo en el que aumenté como 13 kilos, o cuando se me caía el cabello casi nada más de acercar el cepillo…

Sin embargo no puedo hacerlo porque, en primer lugar, ya de todas (o casi todas) ellas se hablaron dentro de la clase. Segundo: no debería hablar de mí. Y por último, finalmente todas me remiten a lo mismo: a mi condenada aprehensión y ansiedad que poco a poco –y para mi fortuna- estoy identificando y resolviendo. Pero no es fácil, porque vivo corriendo. Entre el tráfico y el siguiente trabajo. En uno de mis intentos por curar mi colitis nerviosa, recurrí a la homeopatía. El tratamiento consistía en tomar cada dos horas 15 gotas de 4 frascos distintos de la siguiente manera: primero el 1, a las 2 horas el 2 y así sucesivamente; el 3 y el 4 se alternaban por días y se tomaban 3 veces al día. Creo que me enfermó más. Y no porque no funcionara, sino porque resultó más estresante tratar de acordarme cual frasco me había tomado, y de encontrar un espacio entre clase y clase para hacerlo, pero no podía, así que se me atrasaba el horario… luego intenté establecer métodos para acordarme que día me tocaba cuál, por lo que empecé a hacer pequeños “rituales” como poner el frasquito en determinado lugar para saber que era el que me tocaba, pero luego ya no sabía si era ese o el otro. Me harté, digo, si tuviera el tiempo y la calma suficiente para poder seguir ese tipo de tratamientos, seguramente no tendría colitis, para empezar. Alcancé a ver que la solución estaba en otro lado. 

 
Dejando de hablar de mí para concentrarme en el tema, recuerdo que en una ocasión una alumna comentaba que cuando tuvo a su bebé, no tenía leche (no puedo acordarme el nombre científico de este trastorno) y que eso le empezó a angustiar mucho porque ella creía que a su hijo eso le iba a hacer mal. Fue entonces que su suegra –ya que ella era huérfana desde niña-  le dijo que ella sabía un remedio que consistía en untarle manteca con azúcar en la espalda y ponerse al sol un rato mientras ella le aplicaba la mezcla. Después de dos días, empezó a producir leche. Con esto que ahora sé, puedo entender que debido a la angustia generada por el parto y las regresiones que acompañan a este proceso, se vio alterada la producción de las hormonas responsables, la prolactina y la oxitocina, como esto generaba a su vez más ansiedad, el círculo se vició. Al recibir el cuidad de una figura materna que la contuviera a su vez para empezar ella a hacer esa función, su ansiedad disminuyó permitiendo que las funciones nerviosas y hormonales lo hicieran adecuadamente.

Lo que me quedó claro al término del seminario es que toda reacción ante algún suceso externo o interno, ya sea adaptativa o inadaptativa pueden dejar trazas de una alteración bioquímica o metabólica que se independiza de la causa y persiste de por vida. Lo cual quiere decir que aunque al principio la causa sea emocional, después se convierte en un problema orgánico, que a su vez, generará problemas emocionales con los cuales lidiar.  

La vida es estresante per se. Sin embargo no todos respondemos del mismo modo al mismo estrés.  La respuesta al estresor no depende de la calidad del mismo cómo cada uno lo percibe a partir del umbral que cada cual tenga (la tolerancia a la frustración, la fortaleza yoica, el control de impulsos, etc.) y esto depende a su vez de las experiencias vividas a lo largo de la existencia de cada uno.

La PNIE nos enseña que lo ideal, entendido esto como un funcionamiento óptimo del organismo con todas sus funciones, sería la adaptación circadiana, metabólica, endocrina y psicológica a cambios permanentes. Pero esta adaptación no es de una vez y para siempre. La fluctuación y la adaptabilidad definen la salud. Por lo tanto, la pérdida de esta capacidad sería la enfermedad.

Sólo en la interacción del hombre biológico, sicológico y social con su medio, se entiende que no hay enfermedades sino enfermos. Es momento de empezar a cambiar nuestra postura frente a aquélla discusión viejísima de la dualidad mente –cuerpo y su unión o desunión. Sólo así podremos realmente hacer un buen trabajo.

jueves, 19 de abril de 2012

A un año

Varias personas me preguntaron hoy que si estaba bien. Hoy se cumple un año de la muerte de Rosa, mi tía-casi-mamá. Desde la semana pasada tenía este día en mente, pero no estaba consciente de lo que se iba a remover. A todos les dije que sí, que estaba bien. Pero no es verdad.

La verdad es que no hay semana que no sueñe con ella. A veces en el sueño ella está bien, sonriente, feliz; otras veces está enferma, le duele su brazo; otros más se trata de alguna situación donde yo estoy consciente que ya no está, que ya se fue. Sigo sintiendo que las cosas no debieron haber pasado así. La vida no es justa. Su ausencia pesa, pesa mucho.

El dolor ha disminuido. Los primeros días costaba incluso respirar. Ahora ha dado paso a la tristeza por saber que aún me faltan muchas cosas por vivir y no estará ella para acompañarme. Y las personas que lleguen a mi vida nunca sabrán porqué ella era tan especial.

Escribir este post es difícil. Divago. Me siento dentro de una bruma. Pero sirva esto para abrir mi corazón y dejar constancia del gran amor que le sigo teniendo y estará por siempre. Te extraño. Y te amo.

domingo, 25 de marzo de 2012

Hoy voy a cambiar

Yo se que lo he intentado muchas veces, ésta no es la primera, ni de broma. Pero siento que esta vez es la definitiva. He pasado por muchas cosas y me doy cuenta que mi cuidado va primero y que mi cuerpo debe estar bien para poder funcionar bien. Deseo no sólo verme bien sino estar sana. 

sábado, 24 de marzo de 2012

¿Quién tiene hambre?


En una de mis tardes de ocio, navegando por internet -qué noventero se escuchó eso- me encontré con una entrevista que le realizaron a un hombre, japonés, que justo en el año que yo nací, mató a su compañera de clases para comérsela. Un caníbal, con todas sus letras. No estamos ante el discurso psicótico de "las voces me dijeron que tenía que hacerlo porque si no iba a pasar X cosa", estamos ante un hombre que fantaseó toda su vida con probar la carne de bellas mujeres e intentó contenerlas hasta que no pudo más y terminó saboreando el cuerpo de su amiga, en el sentido más literal.   El link de la entrevista en inglés es éste:

http://www.vice.com/read/whos-hungry-502-v16n1

¿Quién tiene hambre? Una entrevista con Issei Sagawa, el canibal

La tarde del 12 de junio de 1981, un hombre japonés llamado Issei Sagawa se adentró en el bosque en Bois de Boulogne, Francia, cargando dos maletas. El estudiante posgraduado de la Sorbona había matado de un disparo a una estudiante de intercambio, compañera de su clase el día anterior. Después de comer partes de su cuerpo, trató de deshacerse del cadáver en un lago lejano. Algunos testigos lo vieron y posteriormente fue arrestado. De acuerdo con los reportes, Issei dijo lo siguiente a la policía francesa que lo llevó a su casa: “yo la maté para comer su carne”.


Los psicólogos franceses encontraron que Sagawa estaba “legalmente insano” en el momento del crimen y por lo tanto, incompetente para ser juzgado.
Posteriormente, fue excento de toda responsabilidad legal. Regresó a su tierra, donde las autoridades japonesas trataron de juzgarlo por asesinato. Los oficiales de la justicia francesa se negaron a proporcionar los documentos necesarios y de nueva cuenta fue liberado.

Personalmente, creo que comeríamos carne humana si nos encontráramos en una hambruna apocalíptica masiva o si me pagaran $100 trillones por año de por vida y me garantizaran que no me metería en problemas ni me enfermaría por comerla.  Pero aparte de cosas como esas, ¿porqué demonios comerías carne humana? ¿qué eres, un orco?But short of stuff like that, why the fuck would you eat person meat? What are you, an orc? ¿exactamente qué intentaba hacer Sagawa? El editor de Vice Japon, Tomo, el cual probablemente sabría delicioso, visitó valientemente la casa del cabibal para conocer toda la historia.

Vice: Cuéntame acerca de la primera vez que sentiste instintos cabalísticos.

Issei Sagawa: Yo fui débil físicamente desde que nací. Mis piernas eran tan delgadas que parecían lápices. Estaba en primer año de primaria cuando vi la carne trémula de los muslos de un compañero de clases y de repente pensé: “Mmm, se ve delicioso”.  Sin embargo, no soy homosexual, así que desde ese momento hasta que entré a la secundaria me obsesioné con la actriz Grace Kelly, una obsesión que duró hasta que pasé a la preparatoria. Ese fue el inicio de mi gusto ciego por la gente occidental. Después de conocerlas, las mujeres altas, occidentales, saludables, se convirtieron en el detonador de mis fantasías canibalísticas. Yo creo que mi obsesión con este tipo de mujeres proviene del hecho de que yo era bajito, feo y tenía un complejo de inferioridad, por lo tanto, veía a personas que fueran exactamente lo opuesto a mi. Eventualmente, comencé a sentir un fuerte deseo de morderlas, no de matarlas o comérmelas per se, sino simplemente comer su carne. Era simplemente una forma de deseo sexual. No era que quisiera comerme a alguien cada vez que tenía hambre. Pero ¿sabes como uno tiende a sentir un deseo sexual más fuerte cuando has comido bien? Ahí es cuando yo empezaba a sentir la urgencia de comerme a una chica. Es absurdo ¿verdad? En esencia, es un tipo de hambre distinto al que la gente experimenta con la comida. Este impulso canibalístico, cuando digo “quiero comer carne humana”, es un tipo de apetito sexual,  así que si no me aseguro de eyacular frecuentemente y lo suficiente, el deseo solo se vuelve más y más fuerte.

Y esta urgencia tuya estaba tan reprimida hasta que, finalmente explotó en la forma de… digamos, el “incidente” en   Paris?

Después de que me fui a estudiar a Paris, mis impulsos canibalísticos no mostraron signos de disminuir. Casi todas las noches traía a una prostituta a casa y entonces trataba de dispararles desde atrás mientras ellas se lavaban la vagina en el lavabo. Lo intenté cientos de veces, pero por alguna razón mis dedos se congelaban y no podía jalar el gatillo. Por ese tiempo las cosas se trataban menos de querer comérmelas, sino más bien una obsesión con la idea de llevar a cabo este “ritual” de matar a una chica no importa cual. Pero por la misma razón muchas veces falle a la hora de jalar el gatillo. Más que la moral, había un instinto que detenía el movimiento de mi mano.  En algún lugar de mi mente sabía que el mundo en el que vivís se rompería en pedazos en el momento que jalara el gatillo.

Tiempo después, vi a la chica que más tarde se convertiría en mi víctima en una de mis clases en la universidad. Todas las francesas que había conocido antes eran hermosas, pero eran presumidas y estaban totalmente fuera de mi alcance. En contraste, esta chica era tan amigable y cálida. Supe después del asesinato que era judía, por lo que probablemente por eso sintió cierta afinidad con un chico japonés como yo. En cualquier caso, nos volvimos amigos. Un día decidí tener una fiesta sukiyaki [jacuzzi] —solo para nosotros dos— en mi casa. En el momento en que la vi lavarse las manos en el baño, la imagen se sobrepuso en mi mente con las prostitutas lavándose en el lavabo, e inevitablemente se convirtió en otra candidata para “mi ritual”. A partir de ahí, cada vez que la invitaba a subir a mi cuarto, me encontraba apuntándole con una pistola por detrás. Sin embargo, no podía disparar. Entonces un día, uno de los empleados de la compañía de mi padre vino a París y me llevó a un restaurante japonés. Había tenido un poco de fiebre ese día, lo cual probablemente me hizo alucinar, porque todo el tiempo estuve pensando acerca de que ella iría a visitarme al día siguiente y cómo sería si me comiera un poco de carne envenenada del pescado crudo que había comido ahí, y entonces no sería capaz de finalmente realizar la fantasía que me tenía obsesionado por 32 años.  

Y eso hizo que sintieras aún mas que simplemente tenías que hacer eso...

Si. Así que al siguiente día, finalmente jalé el gatillo sobre ella, pero falló. Esto me hizo ponerme histérico y simplemente supe que tenía que matarla. La invité a mi casa otra vez dos días después, y como siempre, lentamente me arrastré por detrás, respiré profundamente, sosteniendo el aire cuando mis pulmones estaban a medio llenar, y jalé el gatillo. Esta vez, el arma se disparó. La chica murió instantáneamente sin sentir dolor. La autopsia reveló que la pistola no fue lo suficientemente poderosa para que la bala atravesara su cráneo, así que se quedó girando en su cabeza. Por un segundo pensé en llamar a la ambulancia pero entonces pensé: “cuelga, no seas estúpido. Has estado soñando con esto cerca de 32 años ¡y ahora está pasando!”.

Lo primero que hice fue cortarle en la nalga. Pero no importaba que tan profundo lo hiciera, solo veía la grasa cerca de la piel. Se veía como maiz y tardé un rato en llegar a lo que era realmente la carne roja. En el momento en que vi la carne, arranqué un pedazo con mis dedos y me lo eché a la boca. Fue un momento verdaderamente histórico para mi. Es decir, no era que sintiera placer o lujuria por el hecho de estar cortando su cadáver, es dificil para mi revivir el incidente y hablar acerca de él, aún ahora...

Um…

Esto sonará raro viniendo de mi, pero en el momento en el que la chica se convirtió en cadáver, me di cuenta de que había perdido a una importante amiga e incluso me sentí arrepentido por un momento de haberla matado. Lo que yo realmente deseaba era comer su carne viva. Nadie me cree, pero mi intención definitivamente era comérmela, no necesariamente matarla. Hasta el dia de hoy, sigo pensando: “si solamente me hubiera dejado probarla, solo un poquito...” Si hubiéramos pasado otra noche cenando y hablando de nuestras familias, nunca hubiera sido capaz de dispararle. En otras palabras, no puedo proyectar mis fantasías en alguien que ya está personificado en mi mente. Es por eso que mis primeras candidatas siempre fueron prostitutas. También tengo muchas otras amigas, pero nunca he soñado en comérmelas desde que las considero seres humanos con sus propias personalidades individuales. La gente me dice que la maté porque la amaba, pero ¿por qué habría de matar y comer a alguien que verdaderamente amo?

¿Te la comiste cruda?

La mayoría, si. Mordí por primera vez su trasero con la intención de comérmelo en ese momento pero ¡es imposible! La piel humana es muy dura. Terminé con un dolor en la mandíbula, aunque me las arreglé para dejarle algunas marcas de mis dientes. Terminé tragándome su clítoris  y algo del pubis sin masticarlo porque estaba en su periodo y el olor era espantoso. Pero fue el primer momento en el que de hecho, sentí un tipo de placer sexual por comérmela, como si mi interior ardiera. Además, ¿sabes que la carne de res o de ballena huele bestialmente al animal? Pues la carne humana es inodora, no huele. De hecho, creo que la carne humana es la más sabrosa de todas las carnes. No tiene ese olor característico a animal. Cuando comí algo más un par de días después, justo antes de ser arrestado, la carne se había vuelto más dulce y sabía genial. La carne de la planta de sus pies olía mal y por eso no sabía tan bien. El cuello fue lo mejor. La carne que tiene un sabor más delicado es la que mueve el cuerpo, especialmente por encima del torso. Su lengua también fue deliciosa. Se la quité de su boca y me la comí cruda. Ni el cuello ni la lengua tienen mucha carne, así que si realmente quieres llenarte deberías comer los muslos.

Voy a preguntarle algo de manera directa, para salir de la duda de una puta vez: ¿Diría usted que estuviera tratando de liberarse de sus inseguridades personales al comer carne humana?

No, no está ni cercanamente a ese concepto. Es simplemente un fetiche. Además, solo quería morderla y tener una pequeña prueba de su carne, más que ser un consumidor de carne humana. Por su puesto, aun tengo este apetito sexual de querer comer el cuerpo de una mujer hermosa. Por ejemplo, si un hombre normal pretende a una chica, tendrá el deseo natural de verla tan seguido como sea posible, estar cerca de ella, olerla y besarla ¿cierto? Para mi, el deseo de comérmela es solo una extensión de eso. Obviamente, el público en general no lo comprende. Pero la cosa es que, por su puesto que quiero comerme a la chica, pero no necesariamente quiero matarla en el proceso. Una vez que ella muere, se convierte en un cadáver, en “una cosa”. Si fuera posible, me gustaría comérmela viva. Francamente, no podría sondear porqué lo otros no sienten el deseo de comer, de consumir a otras personas. ¿Alguna vez has sentido esto?


Yo diría que un suave mordisqueo es suficiente para mí.

Es lo que todos dicen. ¿Entonces que tiene de malo comer? Georges Bataille creía que el beso es el origen del canibalismo, y yo estoy de acuerdo. Siento que proviene de los mismos instintos de querer “saborear” al otro. También creo que eso es solo mi opinión personal.

¿Aun sientes esas ansias canibalísticas?

Oh si, definitivamente.
El deseo de comer personas se vuelve más intenso por junio, cuando las mujeres comienzan a usar menos ropa y a enseñar más piel. Justo hoy, vi a una chica con un derrière verdaderamente hermoso en mi camino a la estación del metro. Cuando veo cosas como esas, pienso en que deseo comer otra vez carne humana antes de morir. Así que si, aún siento esos deseos y específicamente, deseo comer una mujer japonesa esta vez. Pienso también en que el sukiyaki o el shabu shabu [asar ligeramente los pedazos] es la mejor manera de saborear el sabor natural de la carne. Puedes por favor preguntarle a la gente que lee tu revista si quieren que me las coma? Hay una sola condición: deben ser mujeres jóvenes y bellas.

OK, creo que puedo hacer eso. Aquí voy: Hey, mujeres —especialmente jóvenes y bellas japonesas— que están leyendo esto: Issei Sagawa se las quiere comer. Si quieren ser asesinadas y consumidas por él, por favor contacten con la oficina de  Vice en Tokio y nos pondremos en contacto.

Mira, lo que estoy diciendo es que no puedo soportar la idea de dejar esta vida sin haber probado un derrière como el que vi esta mañana, o sus muslos. Quiero comerlos otra vez mientras esté vivo, así podré al menos estar satisfecho cuando muera. Creo que estoy siendo egoísta, pero si pudiera realmente llevarlo a cabo, no tendría problemas en que me mataran ya sea con la guillotina o colgándome o como sea. No hay duda de que en mi mente aún hay pensamientos de querer comer carne humana otra vez. Es decir, es deliciosa. Generalmente se cree que la carne humana no sabe bien, pero es solo un rumor que se ha regado porque es un tabú que no puede ser cruzado. Si la gente descubriera la verdad, estoy seguro que los hombres empezarían a comer mujeres. Así que ellos no hablan de eso porque crearía un pandemonium, pero te digo, la carne humana es extremadamente deliciosa.

¿Estás interesado en otra cosa aparte de la carne humana, como el excremento, por ejemplo?

Comer excremento es ir demasiado lejos, pero había una mujer con quien tuve relaciones y siempre me dejaba beber su orina y su saliva. Ya no me deja hacerlo desde que se casí, pero antes se paraba sobre mi cabeza y orinaba directamente en mi boca. Era delicioso y no olía desagradable o raro en lo absoluto. Lo extraño fue que una vez que dio a luz, empezó a dejar botellas de su orina en mi casa para que me las tomara pero simplemente no pude hacerlo, porque apestaba a maternidad, a una madre cuidando a su hijo. Es horrible decirlo, pero creo que empecé a verla como una “madre” más que como un ser humano sexual.


¿Tienes un mensaje para todas las mujeres del mundo que estén leyendo esto?

Por supuesto, me gustaría invitar a todas las mujeres que quieren matarme que den un paso atrás. Solo mujeres hermosas. Esa sería la forma ideal para mí de morir. Quizá pueden inyectarme morfina y así no sentiría dolor, aunque también creo que el dolor es parte del placer. Morir instantáneamente es aburrido, así que quiero saborear el proceso de ser asesinado. Una alternativa podría ser ahogado por la saliva de una mujer. ¿No sería hermoso ser cubierto con la saliva de mujeres? Si pudiera morir así, sería mi sueño hecho realidad. Cobardemente, soy un hombre que mató a otra persona pero que no puede matarse a sí mismo. Así que creo que morir por las manos de una mujer sería mi manera de redimirme.

¿Qué crees que hubiera pasado si no hubieras jalado el gatillo en París?

A mi edad, no sería raro que tuviera hijos. Mi mayor arrepentimiento es no haberle dado nietos a mis padres. ¿Porqué diablos jalé el gatillo ese día? Esa pequeña acción cambió todo. Hizo un gran impacto en mi vida. Al momento en que la maté, instintivamente pensé “ya no soy un ser humano”. Creo que hubiera sido todo más fácil si me hubieran dado la pena de muerte. Es tan difícil vivir así. Esa es razón suficiente para nunca volver a cometer el mismo crimen nunca más. Ahora, no puedes imaginarte lo dificil que es vivir bajo la vigilancia de la sociedad. Al respecto, realmente creo que la pena de muerte saca a las personas de su miseria, y eso derrota totalmente el propósito del castigo. La familia de la víctima siempre dice algo como: “nunca podré perdonarlo, aun cuando lo mataran”, a pesar de que eso sea el castigo más duro, es tan sin sentido. Aun con cadena perpetua, te dan ropa, comida y alojamiento en la cárcel, además de que te dejan trabajar. Pero si estás fuera, en la sociedad, tienes que encontrar de alguna manera la forma de vivir y encontrar un lugar donde estar. ¿Qué castigo podría ser más duro que ese? Es brutal.

¿Qué haces para vivir ahora?


En el verano de 1989, un asesino serial llamado Tsutomu Miyazaki mató algunas jovencitas, y los medios de comunicación iban a mi casa  a pedirme mi opinión sobre el caso. Ese tipo de exposición mediática al final permitió que mis ensayos fueran publicados en varias revistas. Desde entonces, he publicado uno o dos libros por año. Recientemente publiqué mi 20vo. Libro. Se titula Gokushiteki Bijyogenso [Fantasías extremadamente intimas de chicas hermosas]. Retrata mis sentimientos acerca de las mujrees sin necesariamente enfocarse en el canibalismo, a través de pinturas y palabras. Espero que la gente que lo lea finalmente deje de verme como un monstruo.

lunes, 12 de marzo de 2012

Paradojas del deseo


Debo confesar que me gusta mucho ver televisión. Bueno, mas bien series y películas. Soy fan de Friends, de Sex and The city, de The big bang Theory y, ahora que tengo más tiempo libre, me he dedicado a descargar ver legalmente cofcofpor-si-los-de-SOPA-leen-esto-cofcof varias series que no habia tenido oportunidad de ver: Dr. House, Los Soprano, Mad Men.  

De Dr. House vi hasta la temporada 5 de corrido. Después he visto los capítulos de las temporadas 6, 7 y 8 aunque ya no lo he seguido con tanta emoción. Perdió un poco de su toque aunque claro que veré el final, creo que para mayo. De Los Soprano llevo 4 temporadas y cada vez se pone más emocionante. Apenas comencé con Mad Men, y poco a poco me ha ido atrapando. 

Lo interesante de esto es que me he puesto a pensar en el patrón de estas series: todas son protagonizadas por machos Alfa, unos auténticos machos dominantes con todas las ventajas que eso lleva pero también con las desventajas. Si, caballerosos, protectores, varoniles, seductores, saben lo que quieren y van por ello... pero también machistas, mujeriegos, infieles, misóginos.

Lo cual me hace preguntarme, ¿exactamente qué queremos las mujeres? Porque la opinión general -y me incluyo- es que cualquiera caeríamos rendidas si tuvieramos enfrente a Mr. Big, a Don Draper, a Tony Soprano, a Gregory House... pero ¿no son ellos de quienes nos quejamos? ¿no son ellos los malditos infelices que tanto nos han hecho sufrir? Y sin embargo despreciamos a Ross, a Leonard (porque preferiríamos incluso al terriblemente irritante esquizoide de Sheldon sobre Leonard, seamos honestas), a Aidan. Los chicos buenos, los que siempre están ahí para escucharnos, los que son tiernos, decentes, pero, desafortunadamente, nada atractivos. No despiertan en nosotras el FuckMeRightHereRightNow que los otros despiertan. 

Es curioso cómo decimos que queremos una cosa pero buscamos y tenemos otra. Ahí es donde yo me pregunto: ¿sabemos lo que queremos? ¿somos honestas con nosotras mismas en cuanto a lo que deseamos? Recuerdo una plática que tuvimos una vez con un ex, a quien su ex le dijo que terminó con él porque buscaba una relación tranquila, sin preocupaciones, estable... y que se estaba muriendo de aburrimiento con la vida que su esposo le daba: sin emoción, sin nada inesperado, todo predecible, todo en calma. Así de complicadas somos. Carrie se la pasó AÑOS corriendo tras Big porque según ella, quería sentar cabeza, establecerse, sin embargo, cuando Aidan le pide matrimonio a ella le da urticaria y todo un panic attack. Y sale corriendo. Dejando atrás lo que ella siempre pidió. De locos. 

Y todo esto surge porque yo tampoco se bien lo que quiero. Quizá el chiste de todo sea tener presente que si queremos algo, ese algo lleva también cosas que no nos gustan y que debemos pensar si vale la pena el precio a pagar por tener lo que deseamos. Saber que tendremos que renunciar a cosas para poder tener otras y que siempre que se pierde algo se gana algo y viceversa. 

miércoles, 25 de enero de 2012

Mi lucha

Todos los días tengo una lucha con el despertador. Todas las noches pongo la alarma a las 6, pensando que a esa hora me levantaré, haré mi licuado verde, y después ejercicio. Para estar a las 8 de la mañana bañadita y tomándome mi café matutino. Pero no. La realidad es que suena a las 6, lo pongo a las 7, luego a las 8 y así sucesivamente hasta que me voy levantando a las 9:30 o 10 de la mañana.

En estos momentos no tengo obligaciones matutinas, por lo que la culpa es menos de lo que debería ser, sin embargo quisiera poder empezar mi día temprano, aprovechar mi día completamente, no estar toda adormilada siendo medio día.

Siempre he sabido que no soy una morning person, de esos que se gozan madrugando y que a las 9 de la mañana ya hicieron la mayoría de sus pendientes. No, yo soy más un vampiro. Prefiero dormirme tarde trabajando a las desmañanadas, disfruto más el café a media noche con la página en blanco por llenar a tener que pararme a las 4 de la mañana para terminar de preparar la clase. Y sí, ya se que todos los extremos son malos, solo quisiera encontrar el equilibrio.

Ya busqué mil y un tips para levantarse temprano. Todos coinciden. Pueden haber miles de estrategias, lo que hace que se cumplan es la voluntad y la motivación.

lunes, 2 de enero de 2012

30 cosas para dejar de hacerse a uno mismo

Es un texto que encontré en una página en inglés, tiene algunas cosas interesantes, chéquenlas y feliz inicio de año!!

  1. DEJA DE GASTAR TU TIEMPO CON LA GENTE INCORRECTA. – La vida es demasiado corta para desperdiciarla con personas que solo te restan felicidad. Si alguien te quiere en su vida, debe hacerte un espacio. No debes pelear por atención. Nunca jamás insistas con alguien que no es capaz de ver cuanto vales.  Y recuerda, tus verdaderos amigos no son los que se quedan cuando te va bien, son los que se quedan cuando estás en los peores momentos.
  2. DEJA DE HUIR DE TUS PROBLEMAS. – Enfréntalos.  No es fácil.  No hay personas en el mundo capaces de resolverlos de manera instantanea, no se supone que lo seamos, así no es como fuimos hechos. De hecho, fuimos hechos para molestarnos, ponernos tristes, sentirnos heridos. Porque ese es todo el propósito de vivir: enfrentar los problemas, aprender, adaptarnos y resolverlos a lo largo del tiempo.  Eso es lo que nos moldea y nos convierte en las personas que somos.
  3. DEJA DE MENTIRTE. – Puedes mentirle a todo el mundo, menos a ti mismo. Nuestras vidas mejoran sólo cuando tomamos riesgos y el primero y el más dificil es ser honestos con nosotros mismos.  
  4. DEJA DE PONER TUS NECESIDADES AL FINAL. – La cosa más dolorosa es perderte en el proceso de amar a alguien demasiado y ovidarte de lo especial que eres. Sí, ayuda a los otros, pero ayudate a ti también. Si hay un momento para seguir tu pasión y hacer algo que te importe, ese momento es ahora.
  5. DEJA DE TRATAR DE SER ALGUIEN QUE NO ERES. – Uno de los grandes retos de la vida es er tu mismo en un mundo que trata de que seas alguien más. Siempre habrá alguien más bonito, más inteligente, más joven, pero nunca será como tu. Se tu mismo y las personas correctas te amarán. 
  6. DEJA DE AFERRARTE AL PASADO. – No puedes empezar el próximo capítulo en tu vida si sigues re-leyendo el último.
  7. DEJA DE TEMER COMETER ERRORES.- Hacer algo y que salga mal, en el último de los casos es 10 veces más productivo que no hacer nada. Todo éxito tiene muchos errores detrás de él, y cada fallo está seguido del éxito. Deja de arrepentirte de las cosas que no has hecho, por lo menos no más de las que has hecho.
  8. DEJA DE ACUSARTE POR ERRORES DEL PASADO – Quizá amamos a la persona equivocada y lloramos por errores, pero eso no importa, una cosa es segura: los errores nos ayudan a encontrar a las personas y a las situaciones que sean adecuadas para nosotros. Todos cometemos errores, tenemos batallas e incluso cosas de las cuales nos arrepentimos. Pero tú no eres tus errores, tus luchas y ahra tienes el poder de darle forma a tu día y a tu futuro. Cada pequeña cosa que pasa en u vida te prepara para un momento que está por venir.
  9. DEJA DE TRATAR DE COMPRAR LA FELICIDAD. – Muchas de las cosas que deseamos son caras. Pero la verdad es que las cosas que realmente nos satisfacen son totalmente gratis: el amor, la risa y trabajar en lo que nos apasiona. 
  10. DEJA DE BUSCAR EXCLUSIVAMENTE LA FELICIDAD EN LOS OTROS. – Si tu no eres feliz con lo que eres en tu interior, no podrás ser feliz en una relación a largo plazo con nadie. Debes crear estabilidad en tu propia vida antes de que puedas compartirla con alguien más. 
  11. DEJA DE ESTAR DE OCIOSO. – No pienses mucho o crearas un problema que no estaba en primer lugar. Evalúa las situaciones y toma acciones. No puedes cambiar lo que rehusas a confrontar. Progresar implica riesgos. Punto. No puedes llegar a la segunda base si no das el primer paso.
  12. DEJA DE PENSAR QUE NO ESTÁS LISTO. – Nadie se siente 100% listo cuando las oportunidades llegan. Porque las más grandes oportunidades en la vida nos obligan a crecer y a salir de nuestras zonas de confort, significa que nunca nos sentiremos totalmente cómodos al empezar.
  13. DEJA DE INVOLUCRARTE EN RELACIONES POR LAS RAZONES EQUIVOCADAS. – Las relaciones deben ser escogidas sabiamente. Es mejor estar solo que mal acompañado. No hay necesidad de apresurarse. Si algo debe ser, será -en el tiempo adecuado, con la persona correcta y por las mejores razones-. Enamórate cuando estés listo, no cuando estés solo. 
  14. DEJA DE RECHAZAR RELACIONES NUEVAS SOLO PORQUE LAS VIEJAS NO FUNCIONARON. – En la vida te darás cuenta que hay un propósito para cada persona que coozcas. A veces hay algo que debes probar, algo te enseñarán. Pero lo más importante, algunos harán que saques lo mejor de ti.
  15. DEJA DE COMPETIR CON TODO MUNDO. – No te preocupes si alguien lo hace mejor que tu. Concéntrate en batir tus propios records cada día. El éxito es una batalla solamente contigo mismo. 
  16. DEJA DE SENTIR ENVIDIA DE TODO EL MUNDO. – La envidia es el arte de contar las bendiciones de los demás en lugar de las propias. Pregúntate a tí mismo: qué es lo que tengo que todos los demás quieren?
  17. DEJA DE QUEJARTE Y DE SENTIR PENA POR TI MISMO. – La vida nos lanza curvas por una razón: par enderezar el camino en la dirección correcta para ti. Quizá no lo puedas ver o comprender en el momento en el que pasa, pero así es. Sin embargo piensa en las curvas negativas lanzadas en el pasado. Vas a ver que esas, al final, te dejaron en un mejor lugar, te hicieron una mejor persona, estado mental o situación. Así que sonríe. Permite que los demás sepan que hoy tu eres más fuerte de lo que fuiste ayer, y que lo serás más. 
  18. DEJA DE RETENER RENCORES. – No vivas tu vida con odio en tu corazón. Terminarás más herido que la gente que odias. Perdonar no significa que digas: “lo que me hiciste está bien.”  Significa, “no voy a dejar que arruines mi felicidad por siempre.”  El perdón es la respuesta... vamos, encuentra paz, libérate! Y recuerda, el perdón no es solo para las otras personas, también es para tí. Si es necesario, perdónate, muévete y trata de hacer todo mejor la próxima vez.
  19. DEJA DE PERMITIR QUE LOS OTROS TE MANTENGAN A SU NIVEL. – Rehúsate a bajar tus estándares para acomodarlos a otros que se resisten a subir los suyos.
  20. DEJA DE PERDER EL TIEMPO DANDO EXPLICACIONES. – Tus amigos no las necesitan y tus enemigos no as creen. Haz sólo lo que sientas en tu corazón que es correcto.
  21. DEJA DE HACER LAS MISMAS COSAS UNA Y OTRA VEZ SIN TOMAR UNA PAUSA. – El momento de tomar un respiro profundo es cuando no tienes tiempo para él. Si sigues haciendo lo que estás haciendo, obtendrás lo que has estado obteniendo. Algunas veces necesitas tomar distancia de ti mismo para ver las cosas claramente.
  22. DEJA DE PERDER DE VISTA LA BELLEZA DE LOS PEQUEÑOS MOMENTOS. – Disfruta las pequelas cosas, un día voltearás hacia atrás y descubrirás que esas fueron las grandes cosas. La mejor parte de tu vida serán los pequellos, innombrables momentos que gastaste sonriendo con alguien a quien le importas. 
  23. DEJA DE TRATAR QUE LAS COSAS TE SALGAN PERFECTAS. – El mundo real no recompensa a los perfeccionistas, recompensa a quien hace que las cosas funcionen. 
  24. DEJA DE SEGUIR EL CAMINO MÁS FÁCIL – La vida no es fácil, especialmente cuando planeas algo que vale la pena. No tomes entonces el camino fácil. Haz algo extraordinario.
  25. DEJA DE ACTUAR COMO SI TODO ESTUVIERA BIEN SI NO LO ESTÁ. – Está bien si te derrumbas por un momento. No siempre debes pretender ser fuerte y no es necesario probar continuamente que todo va bien.   No debes preocuparte por lo que otros piensen, llora si lo necesitas, es saludable dejar salir tus lágrimas. Más pronto de lo que piensas serás capaz de sonreir de nuevo.  
  26. DEJA DE CULPAR A LOS OTROS DE TUS PROBLEMAS. – El grado en el que puedes alcanzar tus sueños depende de el grado en el que tomas la responsabilidad de tu vida. Cuando culpas a los otros de lo que está pasando, niegas la responsabilidad y le das a los demás el poder de mandar sobre tu vida.
  27. DEJA DE SER TODO PARA TODOS. – Hacerlo es tan imposible que tratar de hacerlo sólo te desgastará. Pero hacer que una persona sonría puede cambiar el mundo. Quizá no todo el mundo, pero sí su mundo. Así que afina tu puntería.
  28. DEJA DE PREOCUPARTE TANTO. – La preocupación no aligera la carga, solo te quitará la alegría. Una manera de checar si algo vale la pena para preocuparse es preguntarte lo siguiente: esto me importará dentro de un año? dentro de tres? dentro de 5? si no lo es, entonces no vale la pena preocuparse por ello.
  29. DEJA DE CONCENTRARTE EN LO QUE NO QUIERES QUE PASE – Concentráte en lo que quieres que pase. El pensamiento positivo se encuentra al principio de toda gran historia exitosa. Si te despiertas cada mañana con el pensamiento de que algo maravilloso pasará en tu vida y pones atención, con frecuencia te encontrarás de que tienes razón. 
  30. DEJA DE SER MALAGRADECIDO – No importa que tan mal o que tan bien te vaya, despierta cada día agradecido de tu vida. Alguien en algún lugar está luchando desesperadamente por los suyos. En vez de pensar en lo que no tienes, trata de pensar en lo que tienes y que todo mundo está buscando. 
tomado de:
http://www.marcandangel.com/2011/12/11/30-things-to-stop-doing-to-yourself/